top of page

Train Phase,

Armonía a estática

para Steve Reich.

Exposición en Espai Tactel

+info / fotos

HIDDEN TRACKS.
Un viaje sonoro entre-dos.
Texto: Jesús Alcaide.

1952. Manchester. Alan Turing denuncia un robo en su apartamento a la policía británica. Las sospechas recaen sobre Arnold Murray, amante de Turing y un amigo de éste. En los interrogatorios, el que ayudara a descifrar la máquina Enigma y descubrir las acciones que tenían pensado realizar los militares nazis en territorio británico, se derrumba y confiesa su homosexualidad, siendo imputado de los cargos de indecencia grave y perversión sexual. Turing cree que las máquinas piensan. Turing se acuesta con hombres. Turing se equivoca. [1]

Intentando reducir las preguntas del mundo a un código desconocido, Turing va creando una serie de patrones de repetición y diferencia que le van ayudando a descifrar los mensajes que se lanzan desde el bando enemigo para conseguir desencriptar las señales. R nunca será R y a partir de ahí todo dependerá del contexto en el que los mensajes se vayan enmarcando, el día en que se lanzaron, los objetivos militares de ese momento, el ánimo del ejército enemigo.

Las bombas creadas por Turing sólo fueron un paso más en el descubrimiento de lo que en ciencias de computación y matemáticas se considera un “problema de decisión” (Entscheidungsproblem), encontrar un algoritmo general que decidiera si una fórmula del cálculo de primer orden es un teorema. Alonzo Church y Alan Turing demostraron en 1936 que es imposible escribir tal algoritmo, y por lo tanto es imposible decidir a través de él si ciertas frases de la aritmética son ciertas o falsas. We are all algorithms these days.

Después de entrar en prisión, Turing descubre que tras haber estado media vida encerrado entre códigos y algoritmos, máquinas y mensajes, sólo hay una cuestión que no ha podido descifrar. Una carta de amor. Un mensaje con un código secreto compartido. Perfect lovers. We are synchronized. Now and forever. [2]

En 1988, Steve Reich graba Different trains, una composición en tres partes para cuarteto de cuerda y cinta de casette pregrabada que cuenta los viajes que realizó el autor en tren entre Nueva York y Los Ángeles entre 1939 y 1942 a causa del divorcio de sus padres y la separación de ambos en dos ciudades distintas.

En ellas, Reich, uno de los grandes compositores de la denominada comúnmente como música minimalista, intenta producir a través de estas composiciones un paralaje entre estos viajes y los que hubiera hecho un judío como él en Europa en ese mismo periodo camino de los campos de exterminio nazi.

Entre las cuerdas sincopadas, el ritmo de trenes de los años treinta y los mensajes pregrabados de algunos supervivientes del Holocausto, Reich compone una pieza en tres tiempos, antes-durante-después, de una guerra que aparece como telón de fondo de esta composición. Interpretada por el Kronos Quartet, Different trains llegó incluso a conseguir un Grammy en 1990 a la mejor composición contemporánea clásica, alterando los límites entre la música culta y experimental (bedmusic) y el mainstream más comercial (this is music for girls [3]).

Utilizando un elemento puramente biográfico y particular para construir una composición universal que habla sobre un periodo decisivo en la construcción de la historia del siglo XX, Reich consigue así crear un top of the pops de la música minimal compartiendo espacio sonoro con Madonna. Different trains. Express yourself. [4]

2017. Fito Conesa presenta en Espai Tactel Train phase. Armonía estática para Steve Reich, un proyecto de investigación que nace del encuentro fortuito en un viaje en tren desde Barcelona a Valencia del documento de datos con el que los revisores controlan las subidas y bajadas en las diferentes paradas del trayecto. Un mensaje encriptado. Un viaje entre dos ciudades. Una experiencia compartida.

Convirtiendo datos históricos y momentos personales en material musical (cuerdas, voces, sintetizadores), Fito Conesa juega con la alteración de los códigos y la traducción de lenguajes sin ofrecer una solución exacta, sino justamente todo lo contrario, celebrando el secreto, bailando la duda, provocando el enigma.

3 vinilos. 3 momentos. 3 variaciones de un viaje sonoro en el que Fito Conesa continúa investigando sobre los estados de transitividad, el cambio, el entre-dos. Si en proyectores anteriores como Música de cámara (2008) el registro visual del ascensor de su casa en movimiento debía de servir como partitura para crear una pieza sonora, en otros casos como Fantasía y fuga para Tsushima (2015) o Nocturno de Genalgüacil (2016) son los datos y acontecimientos históricos, experiencia personal y accidentes biográficos los que se convierten en material para ser musicado.

Es en este juego de traducción de códigos y lenguajes donde Fito Conesa va poniendo en escena a algunos de sus referentes, sacándolos a bailar, como en el caso de la obra de Félix González-Torres, para una vez que el foco alumbra sobre estos, conseguir que desaparezcan y trabajar con sus ecos y fantasmas. Como escribe Vila-Matas, “en un tiempo en que los artistas increpan y desprecian la obra de sus colegas creyendo que eso los fortalecerá por encima de sus rivales (sin darse cuenta de que dependen de su propio talento y no del hundimiento de otros), yo adoro el encanto de un cierto tipo de libros-raros, gentiles, estimulantes-en los que un artista explica por qué admira a otro”[5].

Seducido por los modos de hacer de un conceptualismo que huye de la frialdad y el desapego, optando por la calidez y los afectos al igual que en la obra de FGT, Train Phase. Armonía estática para Steve Reich, va intensificando la complejidad de los estratos, invitándonos a una escucha cómplice, a una experiencia compartida. Un poco de prohibición, mucho de juego; señalar el deseo y luego dejarlo. Algunas pistas ocultas. Un viaje sonoro entre-dos.

Jesús Alcaide,
Crítico de arte y comisario independiente.

[1] Hidrogenesse. Un digito binario dudoso. Recital para Alan Turing. 2012.
[2] Felix González-Torres. Perfect lovers (love letter). 1988.
[3] Baxendale. You will have your revenge. 1999.
[4] Madonna. Like a prayer. 1989.
[5] Vila-Matas, Enrique. Marienbad eléctrico. 2016.

bottom of page